Los mercados fluctúan, y a la par, puede que tus emociones lo hagan. Requiere de mucho
entrenamiento decidir estratégicamente al momento de operar. Esto es tan importante como el
conocimiento técnico, porque si dejas que tus emociones decidan por ti, puedes perder en un
instante todas tus ganancias acumuladas durante tu carrera.
Anteriormente, hemos mencionado la relevancia de la psicología en el trading; esta vez te
compartiremos unos trucos prácticos que te ayudarán a lograr esa estabilidad emocional deseada, y
así, mejorar tu desempeño.
1. Toma un descanso después de cada operación
Después de un mal trade, despéjate. Después de un buen trade, despéjate. Es importante que lidies
con cada operación como un tema individual y que tras cada operación, te permitas tomar un
descanso. Esto es para evitar decisiones apresuradas con la adrenalina del mercado y que dejes
reposar tus emociones. Puedes tomar una breve caminata, un té y finalmente: reflexionar tus aciertos
y errores en tu desempeño.
2. Deténte por completo después de tres ganancias o pérdidas consecutivas
Es normal que después de tres ganancias consecutivas, te sientas como el mejor trader de la historia e
incluso puedas creer que eres invencible. Esto es excelente para tu confianza, pero nocivo para tu
juicio. Como en el punto anterior, date un respiro y termina el día, antes de que te precipites en
aumentar tu posición y arriesgarte demasiado a perder lo que ganaste. Incluso, puedes recurrir al
sobre-apalancamiento o sobre-operación, lo cual no es lo más óptimo. Recuerda que el mercado es
volátil y debes mantenerte con una cabeza fría.
Por otro lado, si perdiste tres veces seguidas, probablemente te desanimaste y tu confianza está por
los suelos. Estás vulnerable en ese momento y tus emociones fluctúan, esto puede ser la causa de una
decisión enteramente emocional de la cual te puedas arrepentir después.
3. No revises el “marcador”
En el atletismo, o en los videojuegos, el rendimiento se puede ver afectado si el jugador revisa
múltiples veces el marcador en lugar de concentrarse en el juego. Esto mismo, sucede en el trading.
En medio de una operación, te aconsejamos que no estés al pendiente de la cifra de ganancias y
pérdidas en tu cuenta. Con este consejo, no nos referimos a que hagas caso omiso de ella. Sino que
durante tu operación, estés más concentrado en operar que en obsesionarte por tus posibles
resultados.
4. Opera con confianza
Cree en ti mismo, este negocio es arriesgado y no debes dejar que esto te asuste. El trading es para
aquellos dispuestos a tomar el riesgo y confiar en sus estrategias. ¿Cómo construir la confianza? La
respuesta está en dedicarle tiempo a tu formación todos los días. Practica en cuentas demo, prueba
tus estrategias, planea tu rutina y aprende de otros mentores más experimentados. Entre más
herramientas utilices en tu formación, más confianza tendrás en tus capacidades. Además, descubre
qué te funciona a ti para sentirte en el humor para ganar. ¿Es una playlist? ¿Un shot de espresso?
¿Una pelota para el estrés? Conoce tu estilo, respira hondo y arriésgate.
5. Planea tus pérdidas
Antes de operar, averigua qué debe suceder para que consideres a una operación perdedora y cuánto
estás dispuesto a perder por trade. ¿Qué ha sucedido anteriormente cuando pierdes? ¿Qué sientes?
¿Miedo? ¿Frustración? ¿Ira? Lleva este registro en tu bitácora, además de anotar todos los datos
técnicos de las operaciones. Esto te preparará para las inevitables pérdidas que hay en el mercado.
El mercado es el mismo para todos, sin embargo puedes explotar tus rasgos de personalidad a tu
favor al momento de operar. Por ello, es vital que te conozcas a ti mismo e identifíques cómo
reaccionas ante emociones extremas. Cuando el dinero está en juego, es normal tener respuestas
emocionales. Así que te invitamos a que hagas un diagnóstico personal de tus respuestas ante
situaciones victoriosas y adversas en el mercado bursátil. ¿Y a ti qué otras técnicas te funcionan para
controlar tus emociones como trader?